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Invasión


por Mila Oya



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•Sinopsis
Un grupo de jóvenes queda atrapado en el aula del instituto a causa de una repugnante y aterradora invasión de escarabajos gigantes. El hecho de que una de las muchachas estuviese leyendo la Metamorfosis de Kafka y que acabaran de comentar el contenido del relato de este autor estremece a todos los presentes. Todos deberán enfrentarse a sus miedos y colaborar entre ellos si desean salvar sus vidas.

•Personajes:
Noe- Joven que quiere ser escritora.
Jimy- El malote.
Lolo- El listo.
Vane- La pija del móvil.
Bruto- Amigo de Jimy.
Cloe- Amiga de Vane.
Ana- Hermana de Elena.
Elena-Hermana de Ana.
Pedro- Amigo de Pablo.
Pablo-Amigo de Pedro.
Babas- El gracioso.
Eli- La más joven y tímida del grupo.

Invasión
por Mila Oya


Acto único


Es lunes. Todavía faltan unos minutos para comenzar las clases. En el aula hay tres muchachos ocupando sus pupitres. En las primeras filas se halla Lolo, un muchacho aplicado que, bolígrafo en mano, se afana en completar algún ejercicio sobre su libreta. Un poco más atrás, en la fila de pupitres de al lado, se sienta Vane, una muchacha un poco frívola concentrada en su teléfono móvil con el que parece pelearse enojada. Y al fondo del aula está Noe, una joven apasionada de la lectura que sueña con ser escritora y que se muerde las uñas con terror en la mirada, mientras devora las páginas de una novela: La Metamorfosis de Kafka.
Los jóvenes se hayan absortos cada uno en sus propios asuntos cuando entra otro personaje. Se trata de Jimy, un chico fortachón con aire de gran deportista cargado con una gran bolsa con el equipaje para algún entrenamiento. Nadie levanta la vista ante la aparición de Jimy. Todos continúan a lo suyo y él es consciente de que a nadie impresiona su presencia. Será por eso que el fornido muchacho se aproxima con una sonrisa aviesa al pupitre donde Lolo trabaja en los ejercicios escolares y de un manotazo arroja al suelo un bote de lata y unos lapiceros que el joven aplicado tenía sobre su pupitre. Al tiempo le propina una colleja riéndose escandalosamente. El estrépito del bote de lata estampándose contra el suelo sobresalta a todos los alumnos.

Jimy- (Propina la colleja a Lolo, riéndose burlón) ¡Eh tu, Lolo listillo! ¡Espabila! ¿Por qué tiras tus cosas por el suelo? ¡Ja!
Noe- (Se mordía las uñas aterrada por la lectura de la Metamorfosis y el estrépito la ha obligado a soltar repentinamente el libro y a gritar asustada) ¡Ah! ¡Qué susto! ¡Qué me da un soponcio!
Vane- (Se olvida por instante de pelearse con el móvil y también grita mirando al recién llegado) ¡Ah! ¡Tenía que ser Jimy! ¡El bestia de la clase! ¡Cómo no! ¡Del susto casi se me salta el esmalte de una uña! ¡Qué poco funy!
Lolo- (Asustado y en silencio se levanta para recoger los objetos esparcidos por el suelo. Jimy, riéndose, lo empuja y todo regresa de nuevo al suelo con más estrépito) Déjame en paz. (Musita Lolo asustado)
Jimy-(Burlándose toma un puñado de flores secas que han salido del bote de lata que se ha abierto con la caída) ¿Cómo dices, Lololistillo? ¿Has dicho algo? Yo no oigo nada. ¡Ja, ja! No sé por qué te llaman listillo si ni siquiera sabes recoger las “florecillas del campo”. ¡Jua! ¡Qué ridículo con sus “florecillas” en un bote como una niña de parvulario!

Lolo, arrodillado, intenta recuperar los objetos esparcidos por el suelo y también las flores secas, mientras Jimy lo contempla en pie riéndose. Las muchachas observan la escena en silencio hasta que Jimy, continuando con su acoso, empuja a Lolo y este cae al suelo.

Jimy- ¡Ja! ¿Pero qué haces ahora? ¿Es que también quieres fregar el suelo? ¡Pero qué “aplicado el listillo”! ¡Ja, ja, ja! ¡A lo mejor es que quieres besar a las “florecillas”! ¡Es que le dan penita! ¡Jua, jua! (Se burla)
Noe-(Estalla al fin) ¡Ya está bien! ¡Déjalo en paz! ¿Para esto llega pronto a clase “Jimy el bestia”? (Dice con retintín) ¿Para montar numeritos?
Jimy-(Olvida por un momento al muchacho que se apresura a recoger los objetos y las flores secas para regresar al pupitre, y se encara con Noe también con retintín) ¿Y a ti que te pica, “Noelia la fantástica”? ¿Los granos de tu cara? ¡Ja, ja!
Vane- (Sonríe mirando a Noe olvidándose del teléfono por un momento.) ¡A Noe le gusta Lolo! ¡A Noe le gusta Lolo!
Noe- (A Vane) ¡No digas chorradas! Lo que realmente me gustaría sería ver a este bestia analfabeto mordiendo el polvo de una vez.
Jimy- (Rojo de furia avanzando hacia Noe) ¿A quién llamas tú analfabeto, granuda gafuda?
Noe- ¡A ti, so bobo! Es: “granuja gafotas”. ¡Así me insulta todo el mundo! ¡Qué no te enteras, tío!
Jimy- (Furioso retrocede hasta el pupitre de Lolo y de nuevo arroja el bote de lata y las flores secas regresan al suelo. Se ríe a carcajadas, mientras Lolo se agacha de nuevo para recuperarlos) ¡Ja! ¡Mira quien “muerde el polvo”! ¡Tu novio el cobarde! ¡El poeta de las “florecillas del campo”! (Dice con retintín)
Lolo- (Se pone en pie enfadado) ¡Las flores secas son crisantemos para el trabajo de biología! ¡Y yo no soy un cobarde! ¿Te enteras?
Vane- ¡Uh! ¡La que se va a armar!
Jimy- (Se encara con Lolo que es más bajo que él y sonríe sarcástico) ¿Ah sí? ¡Jua, jua! ¿Ahora ya no eres Lolo el listillo, eres Lolito el tontito que va a cobrar un par de leches? (Va hacia él amenazante y cuando parece que va a pegarse con Lolo solo lo asusta) ¡Uh! (Estalla en carcajadas al ver como Lolo se sobresalta) ¡Mira que valiente tu novio! ¡Ja, ja, ja! ¡Creo que se ha “cagao”! ¡Ja, ja, ja, ja! (Satisfecho se aparta de Lolo y busca un pupitre donde sentarse) ¡Todos sois unos cobardes! ¡Siempre “cagaos”! ¡Y yo jamás tengo miedo! ¡Ja, ja, ja!
Noe- (Irónica) ¡Seguro! ¡Apuesto que si leyeses un libro como este: La Metamofosis de Kafka también tú te cagarías! ¿Pero qué estoy diciendo? ¿Me he vuelto loca? ¿Jimy el bestia leyendo un libro? ¿Me habré dado un golpe en la cabeza?
Jimy- (Ocupa su asiento mientras Lolo recoge las flores secas y se sienta rápidamente en su pupitre) ¡Jua, jua! ¿Acaso piensas que un libro de mierda puede acojonarme? ¡Menuda chorrada de Noe la fantástica, “granuda y gafuda”! (Dice con retintín) ¿Qué hay en ese libro del ese tal “Carca” que pueda asustarme? ¿Caperucita y el lobo? ¡Qué miedo! (Dice burlón)
Vane-(Se ríe por lo bajo) ¡Ji, ji, ji! Le ha llamado “Carca”. (Toma de nuevo el teléfono móvil) ¡Es funy! Si esta birria de teléfono funcionase de una vez podría contárselo a mi amiga Cloe. ¡Qué funy!
Noe-Se llama Kafka, animal. Y si supieras lo que es Chequia, te diría que es un escritor nacido en Praga. Pero como no tienes ni idea, solo te diré que en este libro de principios del siglo pasado, un joven se levanta por la mañana convertido en un inmenso y asqueroso escarabajo. Si tuvieses más de una neurona, podrías imaginártelo y entonces serías tú el “cagao” de miedo.
Vane- ¡Un escarabajo asqueroso! ¡Eso no es nada funy! (Manipulando con rabia el teléfono) ¿Por qué no puedo contárselo a Cloe?
Jimy- Las neuronas se las dejo a tu novio el listillo. Se ve que tienen tantas que se ha convertido en un cobarde a tiempo completo amante de las “florecillas secas”. ¡Ja, ja! (Se ríe satisfecho mientras estira las piernas sobre el pupitre y enlaza las manos tras la nuca. Mira a un lado y al otro del aula) ¿Y se puede saber qué leches está pasando aquí que no viene nadie?
Noe- (Con el libro cubriéndose la cara intentando retomar la lectura) Se habrán enterado de que tú hoy llegabas antes y prefieren quedarse fuera. Qué raro, ¿no? (Sarcástica)
Lolo-(Después de haber recogido las flores y los lápices y ya sentado en el pupitre, cierra la libreta y mira hacia la puerta confundido) ¡Jimy tiene razón! (Dice al fin)
Noe- (Baja el libro perpleja) ¿Cómo dices? ¡Esto es el colmo!
Vane- ¡Ji, ji, ji! ¡Súper funy, funy! Ahora los tíos se dan la razón y te dejan como idiota. (Vuelve a manipular el teléfono enfadada) ¡Con tantas cosas funys y no puedo contárselas a Cloe! ¡Es totalmente anti funy!
Jimy- (Mira a Lolo alucinado) ¿Qué pretendes, listillo? ¿Hacer amigos? ¡Puag!
Noe- ¡Pues nada, que la pija tiene razón! Me la juego por ti y tú quieres hacer pandilla con el bestia acosador. ¡Hombres!
Vane- ¡Ji, ji! ¡A Lolo no le gusta Noe! ¡A Lolo no le gusta Noe!
Noe- ¡Cállate ya, pija! ¡Sigue con tu súper teléfono y no des más la vara!
Vane- ¡Ya me gustaría, pero no funciona! (Exclama sorprendida)
Lolo- No pretendo pasar de ti, Noe. Tienes razón en todo lo que has dicho de Jimy y su escasez de neuronas.
Jimy- (Baja los pies del pupitre y se vuelve hacia Lolo enfadado) ¿Qué te juegas a que en un par de minutos estampo tu cara contra el encerado?
Lolo- (Lo ignora y sigue hablando con Noe desde su asiento) Pero también está en lo cierto. (Consulta el reloj) Ya ha pasado la hora de comenzar la clase y solo estamos nosotros. ¡Es muy extraño! ¿Dónde está todo el mundo? ¿Los alumnos, los profesores? ¡Ni siquiera ha sonado la campana!
Vane- ¡Eso! Y además los teléfonos no funcionan. ¿Habéis visto alguna vez algo menos funy?
Noe- (Se queda un instante pensativa y consulta su reloj) Es raro, sí.
Jimy- (Burlándose) ¿Qué pasa, que tus cientos de neuronas se han puesto a imaginar a la vez y ya te mueres de miedo?
Noe- No son cientos de neuronas, “atontao”. Son 86.000 millones. ¡Para que te enteres!
Vane- ¿Y con tantas neuronas ya sabes porque no me puedo poner en contacto con Cloe? Está en el piso de abajo. ¡No comprendo nada! ¡Esto no es nada funy!
Noe-(Confundida) No sé. Habrá habido alguna reunión, algún evento.
Lolo- (Consulta su libreta) ¡Hoy no había nada programado! La clase debería haber empezado hace más de 10 minutos. Y el aula debería estar repleta de alumnos hace ya mucho rato.
Jimy-(Burlándose) ¡Ja! Ya estáis todos muertos de miedo. (Le dice a Lolo) Seguro que todos se han largado a otra clase solo para no cruzarse con un listillo sabelotodo como tu. ¡Jua, jua!
Noe-(A Jimy) ¡Cállate ya, idiota! ¡Todo esto me da muy mala espina! (Dice poniéndose en pie)
Vane- ¡Jo, a mi también! ¿Crees que tendré que comprarme un nuevo teléfono? ¡Eso sería lo menos funy que me ha pasado en la vida, jolín y jolín!
Noe-(Camina hacia una ventana y se vuelve hacia Vane) ¡Déjate ya de “funys” y mira a ver si eres capaz de hablar con alguien que no sea tu amiga Cloe!
Vane- ¡Ji, ji! ¡Buena idea! ¡Es verdad que debes de tener 86.000 millones de neuronas! A mi no se me había ocurrido.
Noe-(Mira por la ventana) No lo entiendo. No se ve a nadie en el patio.
Lolo-(Se levanta y va hasta donde se encuentra Noe) ¡Ni un alma! ¡Esto ya es mucho más que raro! Está claro que ha pasado algo gordo. (Dice preocupado) ¡Muy gordo!
Jimy-(Tranquilo en su pupitre) ¡Jua, jua! ¡Ya están los de las neuronas muertos de miedo! ¡Suerte la mía que no tengo ninguna! ¡Mira como me río! ¡Jua, jua, jua!
Lolo-Esto pinta fatal. (Se vuelve a Vane) ¿Consigues hablar con alguien?
Vane- (Ya muy seria) Anti funy es poco. ¡Hiper anti funy de la muerte! ¡A el teléfono no parece pasarle nada, pero no tiene cobertura y en clase siempre la ha habido! ¡No consigo comunicarme con el exterior! ¿Es o no es súper hiper anti funy?

Todos parecen muy asustados menos Jimy que al fin decide abandonar el pupitre y avanzar hacia la puerta.

Jimy- ¡Jua, jua! Tanta inteligencia en la sala y al final es Jimy, el bestia, el que tiene que asomarse al pasillo para calmar el miedo de los cagones de millones de neuronas.

Lolo y Noe lo contemplan desde la ventana y Vane desde el pupitre. Justo cuando Jimy está a punto de abrir la puerta, una avalancha de jóvenes lo arrollan entrando en tropel en el aula gritando, pidiendo socorro y gimoteando. Jimy se lleva un susto de muerte. Los demás también gritan aterrados desde sus posiciones.

Jimy-(Grita) ¡Ah! ¿Qué mierda pasa? (Un joven le cae encima. Jimy tarda un segundo en reconocerlo. Lo empuja con fuerza y le obliga a detenerse) ¿Qué rayos estás haciendo, Bruto?
Bruto- ¡Jimy! ¡Eres tú! ¡Menos mal! ¡Esto es increíble!
Vane- (Se levanta de un salto y deja el teléfono en el pupitre para salir disparada hacia los recién llegados) ¡Cloe! ¡Amiga! ¡Funy funy funy!
Cloe- ¡Vane, amiga! ¡Súper funy funy, aunque muy poco funy funy! (Grita llorosa. Ambas se abrazan)

Ana, una de las muchachas que acaban de entrar en el aula, con los ojos llenos de lágrimas, cojea. Su hermana Elena la tiene sujeta por la cintura. Ambas buscan un pupitre donde sentarse.

Noe-(Corre a ayudar a las dos jóvenes) ¿Estáis bien? ¿Qué os ha pasado?
Elena- (Sujetando a su hermana y muy asustada) ¡Ha sido terrible! ¿Podrías ayudarnos? Mi hermana Ana se ha caído y se ha golpeado la rodilla. Casi no puede caminar.
Noe- No te preocupes. Te echo una mano. (La ayuda a sentarse en un pupitre)
Elena- (Dejando a su hermana doliéndose en la silla) ¡Gracias! Me llamo Elena. Venimos del piso de abajo. Nos salvamos por los pelos. ¡Todo esto es terrible!

Dos amigos, Pedro y Pablo, que se echan las manos a la cabeza aterrados por el episodio vivido y que se miran confundidos, lo corroboran.

Pedro- ¡Es como una pesadilla!
Pablo- Mucho peor que una pesadilla.
Pedro-Mi amigo Pablo y yo íbamos camino de clase cuando empezó todo.
Pablo- Mi amigo Pedro me dijo: Aquí huele a muerto. ¡Y tenía razón! ¡Menos mal que los muertos no somos nosotros!

Eli, una niña muy tímida que permanecía un poco apartada del grupo, empezó entonces a llorar. Noe acudió rauda a consolarla.

Noe- Tranquila. Ven por aquí, te buscaremos un pupitre. ¿Se puede saber qué demonios ha pasado?
Eli- Gracias (Susurró algo más calmada) Soy Eli y me quiero ir a casa.
Noe- Tú tranquila, Eli. Arreglaremos eso lo antes posible.
Jimy- (Dirigiéndose a su amigo Bruto) ¿Qué mierda está pasando? ¿A qué viene todo esto? ¿Vas a escupirlo de una vez, Bruto?
Bruto-¿Escupir? ¿Quieres que con todo este lío me ponga a escupir? (Escupe en el suelo)
Jimy- ¡Qué no, hombre! ¡Digo, que lo sueltes de una vez! ¡Qué nos digas lo que ha pasado!
Bruto- ¡Ah, claro! ¡Pues eso! ¡Qué nos hemos librado por los pelo, tío! ¡Ya te lo he dicho! Un minuto más en el pasillo y terminaríamos convertidos en un montón de asquerosa comida sanguinolenta.

El Babas, uno de los recién llegados con largas melenas, permanece de espaldas a la puerta con los brazos en cruz para impedir la entrada en el aula.

Babas- ¡Eo, eo! (Dice para llamar la atención de los demás) ¡Chavales! Está muy bien la charleta, pero… ¿Os importaría echarme una mano con la puerta? Soy El Babas y me llaman así porque siempre me da por dormir en cualquier parte y se me cae la baba. Y con toda esta bronca montada en el cole me están entrando unas ganas de echar una cabezadita para pasar de todo. Y os recuerdo que aquí atrás hay alguien que espera que me duerma para entrar en la clase. ¡Y no es Angelina Jolie! ¡Eso lo juro! ¡Jo, jo, jo, jo, jo! ¡Qué buen chiste!
Jimy-(Desesperado) ¿Quién es ese chalado? ¿Y qué es lo que está tras la puerta? ¿Alguien me lo puede decir de una mierda de una vez? (Grita)
Babas- ¡Jo, jo, jo! Yo creí que había quedado claro. ¡Soy el Babas! Porque me duermo siempre y me cae la baba. ¡Jo, jo, jo! ¡Qué buen chiste!
Jimy-(Furioso) ¡Qué no, tío! ¡Qué no quiero saber tu nombre, quiero saber que hay tras la puerta! ¡Ya! (Gritando)

Eli comienza a llorar y Noe le acaricia la cabeza para tranquilizarla.

Noe- (A Jimy) ¿Podrías dejar de gritar de una vez que estás asustando a todo el mundo?
Jimy- ¡Qué dices, tía! ¡Esta peña ya entró asustada! ¡No soy yo lo que les da miedo! ¿Te enteras?
Noe- Eso me extraña bastante. (Burlona)
Babas- ¡Eo, eo, eo! La charleta continúa y…. me está dando el sueño. (Dice entornando los ojos) ¡Jo, jo, jo, jo! ¡Ya empieza a caerme la babita! ¡La que se va a organizar!
Ana y Elena al unísono- ¡Ayudad al Babas! ¡Por favor!

Pedro y Pablo corren hacia la puerta y apoyan las manos sobre el pecho y el abdomen del Babas y empujan para sujetar la puerta.

Babas- ¡Jo, jo, jo! ¡Me hacéis cosquillas! ¡Jo, jo, jo! ¡Jo, jo, jo!
Pedro- (Asustado) ¡Así seguro que no te duermes, tío!
Pablo-(Muy preocupado) ¡Y deja de reírte, Babas, que la cosa no tiene ninguna gracia!
Jimy- (Grita furibundo) ¿Es que nadie me va a decir de una vez que leches hay ahí afuera?

Todos se asustan por los gritos de Jimy. Es su amigo Bruto el único que se atreve a enfrentar la furia del muchacho.

Bruto-¡Yo te lo digo, colega! Ahí afuera hay un ejército de furiosos, asquerosos y gigantes ….. ¡Escarabajos!

Noe, Lolo y Vane abren la boca atónitos y horrorizados, mientras los demás asienten en silencio a la declaración de Bruto.

Jimy- ¿Escarabajos gigantes? (Igualmente perplejo se vuelve indignado hacia Noe. La señala acusadoramente con el dedo mientras brama) ¡Tú! ¡Y Carca! ¡Tú y el Carca ese sois los culpables! ¿Qué tienes que decir a eso?
Noe-(Enfadada) ¿Has perdido la cabeza?
Babas- ¡Jo, jo, jo! ¡Ese sí que es buen chiste! La invasión de bichejos es por una tía y su novio anticuado. ¡Jo, jo, jo! ¡Eso si qué es hilar fino!
Jimy- (Al Babas) ¡Cierra la bocaza y échate una cabezadita! Carca no es su novio, inculto, es el autor del libro del escarabajo.
Babas-¡Jo, jo, jo, jo! Ese libro no me lo he leído. ¡Me esperaré a la peli del Carca! ¡Jo, jo!
Lolo, Noe y Vane-(Sacan de su error a Jimy gritándole) ¡Kafka!
Babas- ¡Jo, jo, jo! ¿El de la Metamorfosis? ¡Jo, jo! Es bastante carca, la verdad. ¡Jo, jo!
Jimy- ¡Carca, Kafka! ¿A quién le importa? Tú y él tenéis que ver con esto. Justo hace unos segundos nos estabas hablando de cuando el protagonista de su libro se convirtió en escarabajo gigante y ahora, según dice toda esta peña, hay una invasión de esos insectos ahí afuera. ¿No me dirás que es casualidad?
Noe-(Bastante confundida) ¡Tiene que serlo! ¡Es una casualidad! ¡No puede ser otra cosa! ¡No lo entiendo!
Lolo- (Corre a tranquilizar a Noe que parece a punto de llorar) ¡Tranquila, Noe! ¡Claro que es una coincidencia! ¡Nadie puede culparte de una invasión de escarabajos!
Pedro-(Mientras empuja el cuerpo del Babas) ¡Escarabajos, sí, pero gigantes!
Pablo-(También empujando el cuerpo del Babas) ¡Escarabajos inmensos!
Vane-(Le pregunta a su amiga Cloe mientras están juntas en el pupitre) ¿Es eso verdad? ¿Algo tan poco funy puede suceder en la realidad?
Cloe- ¡De lo menos funy que he visto en mi vida, amiga Vane! Lo he pasado fatal y todavía fue todo mucho menos funy cuando me di cuenta que no podía llamarte por teléfono para contártelo.
Vane-(Horrorizada) ¡Eso sí que es terriblemente poco funy!
Elena- (Que está cuidando la rodilla de su hermana Ana) ¡Todo es verdad! ¡Es una invasión de escarabajos gigantes! Fue espantoso. Nos perseguían por los pasillos. Corrimos y corrimos buscando un aula donde escondernos. Ana se cayó. Creí que nos iban a devorar. Todas las clases están repletas de escarabajos. ¡Menos mal que encontramos esta! Era nuestra última oportunidad. Ana ya no podía dar ni un paso más.
Eli- (Gimotea y Noe se apresura a acariciarle el pelo) He recorrido todo el colegio escapando de los escarabajos hasta que encontré a este grupo. (Gime) ¡Yo solo quiero irme a casa!
Noe- Tranquilízate. Todo va a salir bien.
Jimy- ¿Y tú cómo sabes eso? ¿Cómo puedes saber lo que va a pasar? ¿Acaso lo dice el libro de Kafka?
Babas- ¡Jo, jo, jo! La invasión de escarabajos al menos ha servido para que este “listo” se aprenda el nombre de un escritor. ¡Jo, jo, jo! ¡Ese sí que es un milagro!
Jimy- ¿A qué te parto la cara y no vuelves a dormir en tu vida, chaval?
Babas- ¡Jo, jo! No te lo recomiendo. ¡Jo, jo! Yo soy la última barrera frente a los escarabajos, chaval. ¡Soy intocable! ¡Jo, jo!
Jimy-(Se lanza contra el Babas) ¿Intocable? ¡Te vas a enterar, “chalao”! ¡Te voy a borrar esa estúpida risita de la boca de un solo golpe!

Cuando Jimy se abalanza contra el Babas, Pedro y Pablo se separan asustados y dejan de empujar. Cuando Jimy ya tiene al Babas cogido de la solapa, este da un paso al frente y es cuando la silueta de un escarabajo es proyectada sobre la pared del aula. Todos vemos el escarabajo y el pánico se desata. Todos gritan y todos, menos la pequeña Eli y Ana que está herida, se precipitan a separar a Jimy del Babas y a empujar la puerta. Es Bruto el que consigue sujetar a Jimy, mientras los demás empujan de nuevo al Babas contra la puerta para repeler el ataque del escarabajo. La silueta desaparece de la pared del aula. Hasta Vane y Cloe están empujando al Babas. Cuando por fin la puerta parece asegurada, ambas regresan corriendo al pupitre y cogen sus teléfonos móviles.

Vane- ¡Esto es lo menos funy del mundo! (Exclama secándose una lagrimita al tiempo que manipula el teléfono) ¡Tenemos que buscar ayuda!
Cloe- ¡Lo más “infuny” del mundo! ¡Y el teléfono sigue sin funcionar!
Noe-(Se retira de la puerta que de nuevo queda a cargo de Pedro, Pablo y del Babas y le dice muy angustiada a Lolo que va a su lado) ¡Yo no tengo nada que ver! ¡Te lo prometo! ¡No sé de qué va esto!
Lolo- ¡Claro que no tienes la culpa! La metamorfosis de Kafka no tiene nada que ver con esto. ¡Te lo aseguro!
Jimy- (Se libera del abrazo de Bruto) ¡Suéltame, chaval, o serás tú el que lleve las leches! (Se vuelve a Lolo todavía muy nervioso) ¿Cómo puedes estar seguro? Hace unos minutos nos han hablado de un hombre que se convierte en escarabajo y ahora pasa esto y tú me quieres hacer creer que no guarda relación. ¿Y tú eres el listo del grupo? (Se vuelve a los demás) ¡Yo os digo que Kafka tiene la culpa! ¡Y Noe es cómplice!
Ana- (De nuevo está con su hermana en el pupitre) ¿Quieres decir que todos esos bichos de ahí afuera son gente convertida?


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